lunes, 16 de diciembre de 2013

Perorata



Si convierto esto en un paradigma, de seguro estoy en serios problemas. Y es que estar frente a situaciones que remecen cada una de mis neuronas -y bajando- es más de lo que puedo soportar. La vida tiene ese ciclismo que de cuando en cuando se aparece para demostrarte que todo es pasajero, lo que junto con el darle manija a cosas sin sentidos, te ocupan demasiado tiempo. Pensar tanto en si o en no, ya no tiene sentido, más que mal, a la única persona a quien tengo que rendirles cuentas es a mí misma. Y desde ahora todo toma ese matiz carmin, iluminado por la pasión y el color de sus ojos. Sé de sobra que estará bueno y quizá teñido por el mismo sentimiento prohibido de la vez anterior.. Diferencias? Las suficientes para cerrar los ojos y poner música ambiental en los oídos, no dejarme caer en el abismo, creer nuevamente en lo que siento. Pero en el fondo, no puedes esperar nada de nadie, cierto? Y por ahi yo no soy la excepción.
Finalmente, lo que me hará feliz es justamente ser fiel a mis principios.



1 comentario:

Pam de Pointe du Lac dijo...


Prefiguración de una huella

..... Lame mis rodillas, devocióname, los muslos, lengua a lengua, lame mi pubis aguardante, sométete, succióname, lame mi deseo y el dolor, asciende por mi vientre, sube, estremece tu piel al roce de la mía, abrázame, muerde mis hombros y tiembla, deja que te invada el temor, la ansiedad, reconoce la huella secreta de los poros, anhélame ...yo besaré tus ojos, morderé los vértices de tu boca, te dejaré temblar desfallecido, rasguñaré el descenso de tu espalda para hundir mi cabeza en tu pelvis, restregaré mi rostro en tu angustia y tendré que sostenerte con fuerza ante la involuntaria flexión de tus rodillas, no debes aún, no debes; luego, con lentitud, pasearán mis pezones por tu vientre, hacia arriba, arriba, pero no me abrazarás, estarás llorando y yo seré poderosa e invencible ante ti y no podrás tomarme, ahora que eres tan vulnerado, doblarás las rodillas y llorarás sobre tu deseo temblando, siempre estremecido, derrotado... entonces, sólo entonces, abrazaré tu cabeza a mi pubis, descenderé hasta ti, desplegaré los muslos abiertos y asilaré tu angustia de mar y arenas que se reventará en mis costas poderosas ahora que habrás comprendido, ahora que el rostro del tiempo se te ha mostrado, ahora que mi huella es indeleble e imposible.


Recuerdas?