¿Cómo te animás cuando bailas a desafiar al tiempo?
¿Cómo te olvidás de lo que pasa si te estás moviendo?
¿Cómo te reís y me mentís? ¿Cómo te vas perdiendo?
¿Cómo despegás el suelo? ¿Cómo transitás el duelo?
No di más
y le di noches exóticas
a mis ideas neuróticas
para poder encontrarte.
No hay un consuelo para el duelo
más que la resignación,
es el dolor o el olvido
y este vacío soy yo.
Y se me fue y se me fue y se lo llevó.
Y se me fue y se me fue y se lo llevó.
Y se me fue y se me fue y se lo llevó.
Y se me fue y se me fue y se lo llevó.
¿Cómo te animás cuando bailas a desafiar al tiempo?
¿Cómo te olvidás de lo que pasa si te estás moviendo?
¿Cómo te reís y me mentís? ¿Cómo te vas perdiendo?
¿Cómo despegás el suelo? ¿Cómo transitás el duelo?
No di más
y le di noches exóticas
a mis ideas neuróticas
para poder encontrarte.
No hay un consuelo para el duelo
más que la resignación,
es el dolor o el olvido
y este vacío soy yo.
Y en nuestros actos más secretos
nos detenemos a pensar,
yo anduve algún tiempo muerto,
me gusta resucitar.
¿Cómo te animás cuando bailas a desafiar al tiempo?
¿Cómo te olvidás de lo que pasa si te estás moviendo?
¿Cómo te reís y me mentís? ¿Cómo te vas perdiendo?
¿Cómo despegás el suelo? ¿Cómo transitás el duelo?
¿Cómo te olvidás de lo que pasa si te estás moviendo?
¿Cómo te reís y me mentís? ¿Cómo te vas perdiendo?
¿Cómo despegás el suelo? ¿Cómo transitás el duelo?
No di más
y le di noches exóticas
a mis ideas neuróticas
para poder encontrarte.
No hay un consuelo para el duelo
más que la resignación,
es el dolor o el olvido
y este vacío soy yo.
Y se me fue y se me fue y se lo llevó.
Y se me fue y se me fue y se lo llevó.
Y se me fue y se me fue y se lo llevó.
Y se me fue y se me fue y se lo llevó.
¿Cómo te animás cuando bailas a desafiar al tiempo?
¿Cómo te olvidás de lo que pasa si te estás moviendo?
¿Cómo te reís y me mentís? ¿Cómo te vas perdiendo?
¿Cómo despegás el suelo? ¿Cómo transitás el duelo?
No di más
y le di noches exóticas
a mis ideas neuróticas
para poder encontrarte.
No hay un consuelo para el duelo
más que la resignación,
es el dolor o el olvido
y este vacío soy yo.
Y en nuestros actos más secretos
nos detenemos a pensar,
yo anduve algún tiempo muerto,
me gusta resucitar.
¿Cómo te animás cuando bailas a desafiar al tiempo?
¿Cómo te olvidás de lo que pasa si te estás moviendo?
¿Cómo te reís y me mentís? ¿Cómo te vas perdiendo?
¿Cómo despegás el suelo? ¿Cómo transitás el duelo?
1 comentario:
Placer culpable que me recuerda las noches cálidas cordobesas.
Publicar un comentario