viernes, 30 de marzo de 2007

lunes, 26 de marzo de 2007

Cuánto mas?





No sé que más se puede agregar a una foto tan explícita...
Sólo que me identifica mas que ninguna otra cosa en este momento.

Bajo los efectos de la clorfenamina, me pregunto cuantas veces más, tendré que seguir parchando mi corazón... Simplemente, hay cosas que no entiendo...
Querer entregar sentimientos en este mundo de mierda, donde todo se vuelve pasajero, donde casi todo esta regido por el sistema, donde cada vez somos mas autómatas... Esta mal?
Y si no es asi, por qué se castiga a la gente que quiere hacerlo?
Cuántas veces más tendré que parchar mi corazón?
Hasta cuando permitiré que mis ilusiones se destruyan con la más vil crueldad disfrazada de preocupación...?

Solo quería vivir y hacer sentir... Sólo eso ...

... Marchita ...







miércoles, 21 de marzo de 2007

Va a escampar

Hoy asume lo que venga
sea para bien, o todo mal.
y aunque pierda lo que tenga
se va a morder para aguantar.
Hoy que claro ve las cosas
que ayer no vio, ni va a exigir
Sobre su pena se posa
quiere entender para seguir.
Llega la batalla
y contra él estalla
algún día va a escampar.
y como sale de esta
quiere la respuesta
sabe que no es escapar.
Hoy que raro que lo miran
se pone en pie y quiere hablar
y a su boca se le olvida
lo que una vez quiso explicar.
Su paciencia va a montar
todo un circo para verlo desfilar.
Al dolor que supo ser
y al que ahora ya no quiere ver volver

Hoy se siente satisfecho
aunque aquel rol, no exista mas
para vida con su pecho
y su canción vuelve a sonar.
Hoy recibe los aplausos
supo ser sal, y también miel
y conecta con sus pasos
que resbalar no cae bien.
Termino su guerra
los pies en la tierra
y su mano a un corazón.
Su pensar tranquilo
su pena un olvido
y su alma una pasión

Hoy asume lo que venga
sea para bien, o todo mal
y aunque pierda lo que tenga
se va a morder para aguantar.
Su paciencia va a montar
todo un circo para verlo desfilar
al dolor que supo ser
y al que ahora ya no quiere ver volver.
Se refugia en un farol
y entre dos flores que siempre apuntan al sol
así cruza su pared
me sonríe y rompe con su propia red.

domingo, 18 de marzo de 2007

Y te dejaria ir...






Y te dejaría ir, para escribir cuanto te extraño.
Para dejar que el viento se aproveche de mi.
Para que con un disparo acabe todo esto.
Y te dejaría ir, para que te enteres de tu necesidad.
Para que vuelvas a mí otra vez,
Arrastrándote sobre el barro.
Y te dejaría ir, es como guardar mis cosas en una caja.
Es como llenarme de frases vacías.
Y te dejaría ir, memorias girando en mi cabeza.
Dejándome llevar hacia la soledad
Dejando que sus dedos me seduzcan.

Y te dejaría ir, aunque no quiera.
Cayendo a un precipicio, donde al final el mar me espera.
Y te dejaría ir, y te esperaría por siempre,
Te amaría, te mataría. Sólo por extrañarte.
Y te dejaría ir, usualmente imagino, el roce de tus labios.
Y te dejaría ir, Te olvidaría, Me sentaría a ver el cielo.
Jugaría con la espuma.
Y te dejaría ir, Para morir poco a poco,
Para ver, como se marchitan las hojas en mi otoño,
que sin ti no termina...


jueves, 15 de marzo de 2007




El hombre no está sólo hecho de desesperación, sino de fe y esperanza; no sólo de muerte, sino también de anhelos de vida; tampoco únicamente de soledad sino de momentos de comunión y de amor. Porque si prevaleciese la desesperación, todos nos dejaríamos morir o nos mataríamos, y eso no es de ninguna manera lo que sucede. Lo que demostraba, a su juicio, la poca importancia de la razón, ya que no es razonable mantener esperanza en este mundo en que vivimos. Nuestra razón, nuestra inteligencia, constantemente nos están probando que ese mundo es atroz, motivo por el cual la razón es aniquiladora y conduce al escepticismo, al cinismo, y finalmente a la aniquilación. Pero, por suerte, el hombre no es casi nunca un ser razonable, y por eso la esperanza renace una y otra vez en medio de las calamidades. Y este mismo renacer de algo tan descabellado, tan sutil y entrañablemente descabellado, tan desprovisto de todo fundamento, es la prueba de que el hombre no es un ser racional.

Ernesto Sabato

sábado, 10 de marzo de 2007

Cosas de la life

Errores. Fuertes errores
Últimamente mi vida no ha sido
más que un triste error.
¿Por qué siempre este sabor amargo?
¿Por qué esa punzada en el estómago?
-- Comprendes algunas cosas mejor que nadie
y no sabes como utilizarlo.
Buscas ayuda sólo donde hay silencio.
¿Por qué todo es tan complicado?
Inertes sombras me atormentan.
Cálidos abrazos me hacen imaginar,
cosas que jamás sucederan.
-- El problema sigue en tí.
Compréndelo.
¿Por qué esta forma de ser, de sentir,
de pensar, me hace tan mal?
-- El mal te lo provocas tú.
Características que has ido adquiriendo.
... Maldito ...
-- ¿Maldito qué?
Maldita sangre que hierve.
Maldito cerebro que no para de pensar.
Malditos sentimientos errados.
-- ¿Por qué no terminas de una vez por todas
con lo que te daña?
Por miedo. Demasiado acostumbrada.
Miedo a una soledad desconocida.
Miedo a una verdadera y trágica soledad.
-- Pero no todo está perdido.
Hay cosas que ya estan en ti,
que nadie va a cambiar.
Miedo.
Cómoda en la situación.
Más bien acostumbrada. A pesar del daño.
A pesar de las marcas. Toque de masoquismo.
-- Toda pasa.
Es cosa de tiempo.

miércoles, 7 de marzo de 2007

Lestat




Deseo que vosotros me veaís. Deseo que me mireís, que contempleís el aspecto que presento actualmente, mientras juro que cada palabra de esta historia es cierta, que la he relatado con sinceridad.
Soy el Vampiro Lestat. Esto es lo que ví. Esto es lo que oí. Esto es lo que sé. Lo único que sé.
Os ruego que creaís mis palabras, lo que he dicho y escrito.
Aún sigo aquí, soy el héroe de mis propios sueños; dejad que continue siendo el héroe de los vuestros.

Soy el Vampiro Lestat.
Permitid que pase de la ficcion a la leyenda.
9,43 28 de febrero de 1994
Adieu, Mon Amour.

sábado, 3 de marzo de 2007

Eternal Blood





Oigo tu voz, que me llama
Acércate…. La noche es para ti.
La sangre al fin se vuelve eterna
Toma mi mano y bébela.
Un íntimo sentimiento
Camina ya por la cuerda floja.
El corazón provocará
El llanto de mi alma.
Has de saber que el infinito puede perecer.

Morirás… tú morirás hundido en el olvido.
Arderás… tú arderás en las llamas de mis ojos.
… tus cenizas me ahuyentaran…