martes, 21 de febrero de 2012



Ya es casi una semana desde que regresamos con mi amiga Danny del viaje más intenso y rockero de nuestras vidas. Y es que encontrar las palabras jsutas que lo describan es simplemente imposible. Fue una completa aventura, desde que nos subimos al bus camino a Mendoza y lo que significó viajar toda la noche hasta Cordoba. Si Buenos Aires me encantaba, Cordoba sencillamente robó mi corazón. Es una ciudad hermosa, con una arquitectura e historia simplemente alucinante. Realmente un lugar en el que desearía vivir.. Pero más allá de mis gustos arquitectónicos, este viaje me sirvió para sentir que hay un mundo maravilloso allá afuera, lleno de magia y de gente increible, que vale absolutamente la pena conocer. Ahora más que nunca quiero conocer todo, sintiendome libre y recorriendo la ruta 40 de principio a fin.

Pronto pronto se vienen más fotitos.