sábado, 2 de septiembre de 2006

Recuerdos




Viernes 2 de septiembre de 2005

08:40

Ya estoy en el avión. Se me quedó mi cepillo y mi perfume.
Tengo ganas de llorar y de estar sola. Mi asiento toca al lado de la ventana y estoy bastante cómoda escribiendo. El aeropuerto es bastante lindo, aunque obviamente se ve mucho cuico… Los asientos son bastantes estrechos. Esta nublado.
Me pregunto que pensaran las otras personas que viajan.
Me pregunto que pensara mi familia y mis amigas.
Un hombre habla dando las recomendaciones y cuando dice “vuelo 621 Buenos Aires” se me aprieta el estomago.
Tanto tiempo esperando esto…
Las azafatas parece que son argentinas. Me caen mal las mujeres argentinas.
No se si los hombres que van son “azafatos” o pilotos de emergencia.
Siento la voz de un pasajero argentino y me dio pena… Florencia es la jefe de cabina… creo que el piloto se llama Mario.
El viaje dura sólo 1 hora 30 minutos.
Sólo 1 hora 30 minutos… La manga se esta retirando.
Son las 08:54 y nos pasaron un papel para las franquicias. Creo que es para comprar allá…
Tengo la sensación de que me enamoro o le tomo fobia al acento argentino.
Afuera hay un tipo que debe ser mecánico… Estamos retrocediendo, falta un minuto para las 09:00
El tipo de afuera tiene unas paletas verdes… El movimiento es suave… Veo el ala del avión.
Son las 09:20 y estamos atravesando las nubes!!!... Estoy cerca del sol!!!... La Colle tenía razón, vamos sobre las nubes! Es precioso!!! Se ven como algodón, suaves, etéreas…
La cordillera es impresionante, yo pensaba que era una pura montañita con nieve, pero no! Son kilómetros y kilómetros de gigante cordillera cubiertos con demasiada nieve…
Ya cruzamos la cordillera y estamos en Argentina!!! Es planicie!!! Estoy en cielo argentino y con un rabino en el asiento de al lado, extraño, no?
Abajo es posible ver algunos terrenos sembrados. 3700 metros de altura… El piloto dice que el camino (cielo?) esta en buenas condiciones.
Nos sirven desayuno. Sándwich de jamón-queso caliente, un te, un cereal y un pote con fruta en conserva.
Son las 10:15 y el piloto dice que en algunos minutos más llegamos a Ezeiza. Hay que adelantar los relojes en 1 hora.
Comenzamos el descenso… Se me taparon los oídos… Tengo ganas de llorar…

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